jueves, 18 de diciembre de 2008

LA MUJER Y EL AMOR

En la pirámide de necesidades, el hombre coloca en su vértice el trabajo (dinero), después la familia (madre) o la amistad (amigos, tomar unas cervezas,...), y en el tercer puesto el amor (la mujer). Sin embargo, la mujer siempre ha colocado en el vértice el amor. Y si le va mal el amor, leirá mal todo. Porque el amor en la mujer es como un termómetro del estado de ánimo. Su vida gira entorno del amor. Y es que la mujer cuando ama lo hace con todo su ser, todo su corazón, todo su alma. Se vuelcaen la relación con el hombre y espera, ingenuamente, que él haga lo mismo.
Carmen Rico-Godoy pone en boca de su protagonista: "Lo que a él le modela el estado de ánimo son sus negocios, su trabajo. En cambio, a mí lo que me afecta es Antonio. Esa es la gran diferencia, ese es el abismo que nos separa". Es, por supuesto, "como ser mujer y no morir en el intento".
La mujer se rige por el corazón; es, ante todo, sensibilidad, sentimiento. Vive para el amor, se viste para el amor. El hombre es más cerebral, manejar el amor de una forma más fría, más calculadora; se rige por la cabeza. Muchas veces es la mujer la que soporta el peso de una relación.


Como dijo una prostituta en una serie de TV: "los hombres se encienden como cerillas, las mujeres se calientan como las planchas". En general, la pasión del hombre remite en cuanto consigue su objetivo.


A la mujer, mal que le pese a las feministas y con razón, sigue queriendo ser conquistadas por un hombre fuerte que las domine. No es extraño escuchar en una conversación de amigas, en la que na le pregunte a la otra ¿porqué dejaste a tu novio, ese chico tan formal y amable, por aquel bala perdida?, la respuesta suele ser: "Qué quieres que te diga, Miguel es tan blando, tan inocente y Carlos tiene ese caracter mas picaro, más malo, nose mas machote. Es que yo hacía lo que quería con Miguel, sin embargo, Carlos hace lo que quiere conmigo. Y eso me gusta" ¿ o no?.


Con esto parece ser que la mujer es masoquista por naturaleza. Muchas de ellas son más machistas que muchos hombres. Son las peores jefas, las que ponen zancadillas, las que ahogan... Es el lastre que arratra a la mujer desde los tiempos de Eva. Lastre que hemos de quitarnos como sea.


" Creo que se puede dominar a los hombres mejor por la seducción que con la guerra. Por eso mi ideal es Cleopatra, es guapa y poderosa a la vez"
Shere Hite

lunes, 15 de diciembre de 2008

EL "SUPUESTO" PAPEL DE LA MUJER EN LA SOCIEDAD

- En EE.UU. se ha publicado un libro sobre "La inferioridad natural de la mujer", escrito por una mujer, Tama Starr. Es toda una antología del pensamiento machidta sobre el género femenino desde la Antiguedad hasta nuestros días. Ya en EE.UU. ha sembrado polémica. Miles de mujeres dudarán en tirarlo por la ventana o en conservarlo para despertar alguna Bella Durmiente que todavía sueña con príncipes encantados y castillos en el aire.

- Un lugar preeminente lo ocupa la Iglesia Católica con Juan Pablo II , entre otras, la siguiente frase: "Quiero recordar a las mujeres que la maternidad es su vovación, su vocación eterna".

- Mucho más lejos llega el ex dictador Ferdinand Marcos: "El puesto de una mujer está en la alcoba", no pensaba lo mismo su mujer Imelda Marcos.

- El filósofo Plutarco estaba convencido de que "la mujer no debe tener sentimientos propios adecuarse a los de su marido".

- William Shakespeare resume su pensamiento en una frase lapidaria: "La mente del hombre es de mármol, la mujer de cera".

- El naturalista y filósofo inglés Darwin afirmó: "Se admite generalmente que en la mujer los poderes de la intuición, la percepción y quizá la imitación son más señalados que en el hombre, pero algunas de estas facultades, al menos, son características de las razas inferiores, y, por consiguiente, de un estado de civilización pasado y menos desarrollado".

- Y para terminar con esta antología de "perlas machistas" baste la del filósofo alemán Schopenhauer que dijo: "La mujer es un ser con grandes melenas y pequeñas ideas".


Los experimentos científicos, por su parte, afirman que en una escala de la distribución del coeficiente de Inteligencia hombres y mujeres obtienen la misma media. Sin embargo, el hombre muestra una mayor variabilidad, pues supera a la mujer en los coeficientes más altos y en los más bajos. La mujer supera al hombre en el nivel madio con un amplio margen. La mujer es más equilibrada. Por otra parte, esto acaba con el mito de la "chica tonta"